Al despertar el alba

Transcurre la tristeza diaria de cada ocaso

Cada mañana me siento a esperar el olvido

Me canso al peso doloroso de los años transcurridos

Minutos que asesinan lo que encuentran a su paso

Los ocultos pensamientos y los deseos reprimidos

 

Solo tu rostro permanece sin duda

Recuerdo cada instante y sin premura

Tus manos, tu cuerpo, tu aroma altivo

Es tu recuerdo lo que aun evita mi locura

Y por ti mi corazón aún se siente vivo.

 

Tu promesa cumplida de haberte ido

No recuerdo a quien puedo echar la culpa

Me fue dejando roto, sin arreglo, sin motivo

Me arrancó de tajo la piel y sin piedad la vida

Prisionero quede, sin razón y sin posible huida.

 

Ya son muchos años los que llevo prisionero

Y aun te pienso mucho para serte muy sincero

Me culpo a veces por haberte conocido

Porque inocente o culpable fue dictada mi condena

Enviado a la más cruel, la que causa el olvido.

 

Me lamo las heridas que dejó tu partida

De esta triste cárcel que son tus recuerdos

rememoro que tu boca era mi fruta preferida

Ayer contigo vivía en el cielo,

Hoy sin ti no siento, el derecho de seguir con vida.

 

No importa donde fuiste, tu tumba no me habla

Es el silencio de mi alma el que de verdad me mata

Porque solo tu voz escuchaba cuando viva estabas

Dame Dios la fuerza para ir a encontrarla

Y abrace mi muerte y a ella, al despertar el alba.